Investigadores de la Universidad de Tel Aviv (Israel) están trabajando en una vacuna de administración nasal que podría proteger frente al Alzheimer y al ictus, además de funcionar cuando los pacientes ya presentan síntomas de la enfermedad. La investigación con esta nueva tecnología se publicará en ‘Neurobiology of Aging’.
Estos científicos han modificado una vacuna cuya tecnología pertenece a la farmacéutica GSK, activando un mecanismo natural del organismo que lucha contra el daño vascular en el cerebro.